«Aquí no arrestarás a nadie», revela que militares facilitaron la fuga de los atacantes
The Washington Post presentó a todos los altos funcionarios de Lula a los cuarteles para detener a los agresores y tres líneas militares impidieron su paso.
Soldados brasileños impidieron el domingo la Detención de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro que atacaron las sedes de los tres poderes públicos en Brasilia, revelado en la jornada de hoy la prensa estadounidense.
«Aquí no arrestarás a la gente»dijo el comandante del ejercito, general Julio César de Arrudaal ministro de Justicia, Flávio Dino, según dos funcionarios presenta citados por el diario El Correo de Washington.
De acuerdo con la reconstrucción del periódico, «cuando altos funcionarios de la administración Lula llegaron al cuartel general del Ejército el domingo por la noche con el objectivo de detención garantizada de los insurgentes en el campamento, se encontraron frente a tanques y tres líneas militares», citó la agencia de noticias ANSA.
Este acto de protección, «que según funcionarios del gobierno de Lula dio tiempo a cientos de simpatizantes para escapar del arrestoes uno de varios indicios de un patrón preocupante que las autoridades ahora están investigando como evidencia de una supuesta connivencia entre y militares policias y los miles de alborotadores invadida por las instituciones».
El mismo patrón, según el diario, es también «un cambio en el plan de seguridad ante los devastadores reunidos afuera de los edificios federales el domingo», además de «la inacción policial y hermandad cuando comenzó a ingresar a los edificios, y la presencia de un alto mando de la policía militar que había dicho a sus superiores que estaba de vacaciones».
El artículo se basa en entrevistas con más de 20 altos funcionarios de la administración y el poder legal, organizadores de protestas, participantes e incluye detalles no informados anteriormente del ataque de cinco horas que sacudió al país sudamericano.
Los primeros indicios de connivencia entre la policia y los atacantes
Varias horas después de que iniciara el ataque a los gobiernos edificios de Brasil, comenzó a tomar fuerza la sospecha de connivencia entre la Policía de Brasilia con los manifestantes bolsonaristas de los videos que circulan en las redes sociales y la sugerencia de seguridad en los medios.
Según publicó el sitio globo.com el domingo pasado, un grupo diez policías fueron militares filmados hablando con los atacantes y grabando imágenes de la invasión del Congreso Nacional en sus teléfonos celulares.
Mientras los radicales subían la rampa y destrozaban el edificio, la policía esperaba junto a los vehículos, sin ninguna acción para contener a los extremistas, reporta el medio brasileño.
La invasión ocurrió a través de un encuentro con la Policía Militar en la Explanada dos Ministérios, en Brasilia. Los participantes en actos antidemocráticos portaban palos y piedras.
Según registrado globo.comLa policía militar trató de contener a los radicales con gas pimienta, pero invadió el área de contención que rodea al Congreso Nacional.
Los delitos denunciados por Lula Da Silva
En su discurso horas después del ataque, el presidente lula da silva había afirmado que van a tener que pagar también los policías del Distrito Federal que fueron filmados impidiendo detener a los manifestantes.
El mandatario remarcó que hubo un operador de seguridad defectuoso.
«Creemos que seguridad hubo falta y quiero decir que todas las personas que hicieron esto fueron encontradas y serán punidas», dijo Lula en Araraquara, estado San Pablo, donde estaba de visita por una tragedia de inundaciones.